El sueño de la Final Four para el Barça de Grimau se ha esfumado. Olympiacos se aferró al partido durante tres cuartos y en los minutos decisivos, el conjunto griego gestionó mejor el ataque para llevarse el triunfo (59-63) y dejar a los blaugrana sin una plaza en la Final Four de Berlín (a la que fallan por primera vez en los últimos tres años). El desacierto en el triple (3 de 25) condenó a los catalanes, que se quedaron a un suspiro de llevarse el triunfo.
Se inició el partido con un ambientazo espectacular en las gradas del Palau. No cabía ni un alfiler. Tras más de 2m sin ninguna canasta en el encuentro, Laprovittola se encargó de abrir la lata (2-0) con su ya característica jugada. El argentino fue el encargado de animar la noche con dos triples consecutivos (8-2, min. 6). Ricky Rubio, entrando agresivo y recuperando varios balones, le dió frescura y garra al Barça. Al final del primer cuarto se llegaba con un pobre 12-9, fruto de la igualdad en un encuentro donde se imponían las defensas y el miedo a no perder.
Un muy buen arranque del Barça en el inicio del segundo cuarto, con un parcial de 6-0, ponía el 18-9 y obligaba a Bartzokas a parar el partido. Se venía arriba el Palau. Willy se estaba imponiendo claramente en la pintura, con 6 puntos consecutivos. El rebote ofensivo, clave para que el Barça estuviese por delante en el marcador y generara segundas jugadas. ‘Lapro’ mantenía a los azulgranas en control con sus acciones (22-15) donde cada canasta era una hazaña. El argentino forzaba faltas y tiros libres, tirando del equipo (25-17). Olympiacos encontró aire en Milutinov (25-21) y al descanso, el Barça por delante (27-25) pero Olympiacos totalmente metido en el duelo.
Empezaba el tercer cuarto con un Barça que siguió estirándose y manteniéndose por delante en el marcador. Laprovittola volvía enchufadísimo y los de Grimau ponían un 38-30 que hacía venirse arriba a los aficionados azulgranas.
A 15m del final, 38-33. Mantenían la ventaja los catalanes pero sin encontrar ninguna continuidad en el juego. Un mate de Vesely, un triple de Abrines, pero entre medio varias posesiones perdidas, con tiros precipitados y algunos balones perdidos. Olympiacos, por su parte, vivía en una dinámica muy similar. Sin jugar cómodos en ataque, sin encontrar soluciones a la defensa del Barça, seguían cerca gracias a alguna canasta afortunada, a algún despiste del Barça o al talento individual de alguno de sus jugadores.
El Barça entendió bien que era un partido al límite del reglamento y nadie lo comprendió mejor que Ricky Rubio. Sus robos encendieron al público en un duelo extremadamente físico y trabado, lleno de tensión y épica pero poco baloncesto. El exceso de faltas castigó a los azulgranas, que entraron empatados al último cuarto con un marcador escaso (40-40).
El Barça parecía que comenzaba mejor el último cuarto, con Vesely reactivado y Laprovittola tirando del carro en los momentos más complicados. El base-escolta argentino se crece cuando otros encogen. Pero Olympiacos, muy mejorado en defensa, se puso por delante en el marcador a cinco minutos del final con un triple de McKissic (47-49), que repitió poco después para silenciar el Palau (49-53).
La puntilla la ponía un triple de Papanikolau (49-57) que dejaba al Barça ‘tocado’. Los azulgranas lo intentaron en los instantes finales (54-57) pero un balón perdido por Laprovittola permitió a Milutinov anotar y sentenciar el encuentro y las opciones de Final Four para el Barça (59-63).
Fotos: Barça Basket y Euroleague
Twitter: @alexgomezse
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