El argentino, al igual que hizo en la victoria en Kaunas, dio el triunfo al Real Madrid con un triple ‘in extremis’ (95-92). El Joventut de Badalona de Dani Miret tuvo sus opciones en las jugadas finales, pero dos discutibles decisiones arbitrales en su contra les acabaron perjudicando
Gran partido el que realizó el Joventut de Badalona en el Wizink Center, mejorado sustancialmente en el debut del técnico Dani Miret. Pese a ello, no fue suficiente para sorprender a un Real Madrid beneficiado por las decisiones arbitrales. Los blancos, con un triple de Deck a 1,6 segundos del final, se llevaron la victoria para mantener su pulso en el liderato con el Unicaja (95-92).
En los primeros minutos del partido, el equipo de Badalona veía cómo el Real Madrid entraba a canasta con mucha facilidad. Eso le hizo dejar de lado el triple hasta que en su primer intento, con casi cuatro minutos jugados, Mario Hezonja hizo diana para poner el 11-5. Poco a poco los verdinegros se fueron entonando y gracias al acierto de Kraag desde la línea de tres cerraron el primero cuarto perdiendo por tan sólo dos puntos (22-20).
En el segundo cuarto la Penya se mantuvo intensa atrás a pesar del castigo que suponían las faltas y delante no tuvo complejos, esta vez con Ruzic y Andrews sumándose al festival de triples para tomar la delantera hasta el 27-31. El Madrid reaccionó con poca consistencia y los verdinegros dieron otro tirón poco antes del descanso con canastas de tres de Evans y Ribas, y bandejas de Busquets y Evans. El 37-45 del descanso había levantado el ánimo al equipo badalonés.
En la reanudación llegó la reacción local, con un Madrid mucho más intenso. En parte, por los errores defensivos del Joventut, que dejó solo a Tavares varias veces bajo el aro. Musa y Hezonja (11 puntos en el tercer cuarto) ayudaron también con un parcial de 16-3 que abrió una pequeña brecha (53-48). Los verdinegros se agarraron a Andrés Feliz, que retó a las torres blancas en sus penetraciones. Metió ocho puntos en el tercer cuarto para sostener a su equipo al final del tercer cuarto (68-65).
Empezó el último y el definitivo cuarto con un Madrid incapaz de cortar la goma a la que se agarraban los verdinegros, que volvían y volvían y no se desenganchaban del encuentro. A falta de 3:30, Hezonja embocaba su quinto triple (de siete intentos) y ponía el +9 (88-79). No era la sentencia porque replicaron de tres (y rápido) los verdinegros, con Pau Ribas, Ruzic y Andrews.
Y en el tramo final, llegó la polémica. Con 91-90, a falta de 55 segundos, Feliz robó el balón a Llull. Aparentemente, sin falta. Fue la quinta del base verdinegro. Después, los árbitros revisaron por dos veces un posible tapón ilegal de Hezonja sobre Andrews que habría sido un 2+1, pero el balón no estaba por encima del aro. El escolta empató a 92 con dos tiros libres a falta de ocho segundos. Luego llegó el triplazo ganador de Deck, a falta de 1,6 segundos. Evans lo intentó forzadísimo en el último instante, pero no pudo anotar y el Madrid acabó sumando el triunfo ante un Joventut muy mejorado en el debut en el banquillo de Dani Miret (95-92).
Fotos: ACB y Club Joventut de Badalona
Twitter:@alexgomezse
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