Estamos en el mes de septiembre, y eso es sinónimo de Copa Davis. Pese a no tener el formato anterior y que el actual esquema está siendo muy criticado, y con justeza, por todo el entorno del tenis, siempre para los jugadores es algo especial representar a su país. Los octavos de final (que se disputan en formato de fase de grupos) se disputaron en cuatro ciudades diferentes (Bologna, Manchester, Valencia y Zhuhai), una muestra clara del desastre que hizo la empresa ex dueña del torneo, Cosmos de Gerard Piqué. El año pasado finalizó el contrato que tenía Piqué con la ITF porque claramente los números no cerraban por ningún lado. Y lamentablemente lo que sería la FIFA del tenis no quiso o no pudo implementar cambios que le permitieran recuperar la frescura a la Davis.

La delegación Argentina pisó suelo inglés con pocas expectativas, realmente. El hecho de tener que jugar en cancha dura indoor, superficie que no le viene bien a los tenistas latinos, y tener que enfrentar a jugadores como Aliassime, Shapovalov o Draper, o a la misma Finlandia que 2 años antes le había ganado con superioridad, daba a suponer que las oportunidades de clasificar eran realmente bajas. Y más viendo las declaraciones previas de Sebastián Báez, demostrando algo de desconfianza en la previa.

La primera de las 3 series fue un espanto para la albiceleste. Primero Fran Cerúndolo caería ante Shapovalov y lo mismo Sebastián Báez ante Félix Auger-Aliassime. Ya la serie se había perdido, aunque con la chance de descontar en el dobles, que por suerte lo hizo, y así tener aunque sea alguna esperanza de pasar. Pero para eso el cambio de chip y de decisiones por parte del capitán Guillermo Coria tenía que aplicarse rápido.

Llegó el día viernes, con mucha presión encima para la delegación, que estaba obligada a ganar las 2 series, y en lo posible 3-0, para no tener que depender de otros resultados.

Esta vez el que abrió la llave fue Tomás Etcheverry, que reemplazó a Báez. Tomi venía teniendo mejores sensaciones en las últimas semanas con el cambio de entrenador y, aunque no era garantía de triunfo, podría dar pelea. Y la verdad que el «retu» jugó con el corazón y con una gran performance, se impuso ante Daniel Evans en sets corridos.

La esperanza estaba cada vez más cerca. Post triunfo de Tomi llegaba el turno de Cerúndolo, que tenía en frente un rival durísimo, pero también cansado, como Jack Draper. El joven de 21 años viene de hacer semifinales en el US Open y el hecho de haber tenido un gran desgaste en el certámen, daba algo de margen en lo físico para ilusionarse.

El partido fue muy apretado. El primer set se definió en tiebreak y el segundo parcial fue 7-5 para el argentino, que estaba jugando más visitante que nunca.

Salvó varios break points durante el encuentro, tuvo la chance de evitar el tiebreak cuando sacó para partido 5-4. En el segundo set se mantuvo en la misma sintonía que en primero. No bajó el nivel y cuando olió sangre en el 6-5 del segundo set, fue por más y concretó uno de sus mejores victorias en esta superficie.

Con la serie ganada, solo quedaba el dobles. Lamentablemente la pareja conformada por Máximo Gonzáles y Andrés Molteni cayó ante la dupla Evans/Skupski, cerrando la serie 2-1 para Argentina

No había mucho tiempo para festejar, porque al día siguiente se definía todo ante Finlandia. Coria plantó el mismo equipo que le había ganado a Gran Bretaña. Primero Etcheverry enfrentó a Eero Vasa (697 ATP). En la previa era un rival accesible, pero la superficie y el hecho de que en la Davis el ranking a veces no pesa tanto, daba lugar a la duda. Vasa jugó un primer set espectacular, disimulando muy bien la gran brecha de ranking entre uno y otro. Pero la nafta le dió hasta el final del primer set, donde lo cedió en el tiebreak. Y luego Tomás sacó la chapa de top 30 y con dos quiebres le bastó para ganar el encuentro por 7-6 6-3 y poner 1-0 la serie. Las chances de clasificar a Málaga cada vez eran más altas.

Nuevamente Cerúndolo era el responsable de sellar la llave, pero Virtanen no se la hizo nada fácil. Le robó el primer set por 7-6 y las dudas empezaban a llegar en el banco argentino, pero rápidamente Cisco mostró porque de su camada es el que tiene mas herramientas y potencia. En menos de 30 minutos equilibró el partido arrasando por 6-1 en el segundo parcial, y ni hablar en el tercero, donde la clavó un rosco al finlandés.

Fue triunfazo del argentino por 6-7 6-1 6-0 y con un pie y medio en las finales. Pero como se sabe, el dobles en la Davis es importante, y no fue la excepción.

Quizás no fue el mejor nivel el que mostraron Gonzales y Molteni a pesar de haber ganado 2 de sus 3 partidos, pero la experiencia, la química entre ambos y la entrega, hicieron que con sufrimiento, dieran vuelta el partido ante Heliovara/Kaukovalta por 6-7 6-4 6-3 para después de 5 años, poner a Argentina de vuelta en la pelea por la ensaladera de plata.

Debo decir que la tenía muy jodida argentina en la previa. Con el capitán cuestionado, con un equipo que no lograba tener resultados de visitante y que le es bastante esquiva la superficie, dieron la cara y relucieron una gran performance. Sin dudas es el mejor resultado tanto de Cerúndolo como de Etcheverry en indoor. Y más ahora que comienza la gira asiática semi indoor, este resultado los va a llenar de confianza, que seguro les permitirá llegar con más comodidad a las finales de noviembre.

No hay que olvidar que la actual dirigencia de la AAT votó a favor de este formato en el año 2019, sabiendo las consecuencias positivas y negativas que le traería a futuro. Lo bueno, un mejor ingreso económico, lo malo, los resultados deportivos. Y más con jugadores que se formaron en polvo de ladrillo y que los partidos que habían disputado en cemento en su carrera eran contados.

Tras el desastre del 2022 en Bologna, la selección sufrió mucho. Coqueteó entre el descenso a la zona americana y la permanencia en el grupo mundial. Zafó de local en una muy sufrida llave ante Kazajistan y sobrevivió. El miedo a que se repita la historia del 2022 estaba, pero esta vez la actitud y las decisiones fueron diferentes. Primero Coria «pifió» con poner a Báez como segundo singlista, sabiendo que no está con confianza y que no se lleva ben con el cemento y con poner a Cerúndolo como primer singlista. Luego para las otras 2 llaves aplicó más la lógica y, aunque podía fallar, no falló.

Ahora será cuestión de esperar quién será el rival en noviembre. Los países clasificados son Argentina, Canadá, Australia, Italia, Países Bajos, Estados Unidos, Alemania y España, esta última jugó las quailfiers (octavos) con una invitación.

A la albiceleste le podría tocar Italia o Estados Unidos, mientras que España y Canadá están por la parte inferior del cuadro.

Será tan duro o más como la fase de grupos, pero no tengo duda de que el equipo dejará todo.

Personalmente creo que si la AAT va a seguir avalando este formato, deberá ser prioridad empezar a organizar torneos en cancha dura para los juniors y los profesionales, así sean en futures o challengers, porque si el objetivo a futuro es ganar de nuevo la copa y tener jugadores en los más alto del ranking ATP, será cuestión de hacer una transición de superficies, aunque sea, en la mitad de las canchas que hay el el país, sino será muy muy difícil ser realmente competitivo.

 

 

 

 



AG Deportes Cobertura

Leave your vote